Las ballenas jorobadas llegan a medir entre 12 y 16 metros de longitud y pueden pesar más de 36 toneladas. Su avistamiento es un atractivo turístico en las costas del Pacífico y muchos turistas están dispuestos a vivir la experiencia de estar lo más cerca posible de estos imponentes titanes del mar.
Un instante mágico de contacto con la naturaleza, se puede convertir en una historia de terror, así como lo vivieron Julie McSorley y Liz Cottriel, quienes son tragadas por una ballena jorobada, aunque al instante fueron liberadas de las fauces del cetáceo.
Julie y Liz estaban en medio de un paseo en kayak frente a la costa de Avila Beach, en California, cuando un grupo de estos animales se alimentaban. Ellas quisieron conservar este recuerdo al grabar el momento de su encuentro con sus teléfonos celulares. Todo era tranquilidad, hasta que pasaron el susto de su vida.
Estaban en su kayak, cuando de pronto un banco de peces se les acercó y súbitamente vieron la boca de una ballena jorobada las capturaba al tratar de alimentarse. El espeluznante momento quedó grabado en video.
“¿Estás bien?”, preguntó una de ellas. “Sí, todo bien”, respondió la otra.
“Me dije a mí misma que tenía que empujar a la ballena, pero ¡cómo voy a empujar a una ballena! Pensé que estaba muerta y, después, noté que estaba en el agua”, comentó Liz.
Julie tan solo declaró que estaba llena de adrenalina porque cuando la vio, literlamente estaba adentro de la ballena, pero después notó que estaba flotando en el agua.
Tras el momento de susto, las mujeres fueron auxiliadas por otras personas que estaban en el lugar y posteriormente las ayudaron a regresar a la orilla para que pudieran contar su gran historia.