Una posada supuestamente organizada por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera fue dispersada por elementos de distintas corporaciones policíacas.
La fiesta se realizaba en la comunidad de San Diego, perteneciente a la sindicatura de El Dorado, al sur de Culiacán, Sinaloa, y había unas mil personas.
En un escenario, donde estuvieron amenizando grupos norteños y bandas locales, había decenas de regalos con las iniciales del Chapo, exlíder del Cártel de Sinaloa, actualmente preso en Estados Unidos, y siete vehículos, modelo 2021, que serían rifados entre los asistentes.
Supuestamente, los hijos de “El Chapo” huyeron del lugar cuando arribaron los uniformados.
El secretario de Seguridad Pública de Sinaloa, Cristóbal Castañeda Camarillo, dijo que acudieron por la concentración de personas, quienes no tenían ninguna medida de sanidad, para prevenir contagios de covid-19.
Al lugar llegaron elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional, Guardia Nacional y Policías Estatales, provocando que las personas se comenzaran a dispersar de inmediato, sin que ninguna de ellas fuera detenida, informaron las autoridades.
Cuando todas las personas se retiraron, quedaron siete vehículos abandonados, sin placas de circulación, y debido a que nadie los reclamo, fueron asegurados, y puestos a disposición de las autoridades correspondientes, sin embargo, los asistentes dijeron que los vehículos iban a ser sorteados durante la posada, entre todos los asistentes.
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