Los prototipos de chip que ha elaborado Neuralink ya han sido probados en animales y se busca comience pruebas en humanos.
El proyecto de Elon Musk para crear una interfaz cerebro-computadora que monitoree la actividad cerebral está en proceso por Neuralink cuyo objetivo es optimizar el funcionamiento humano así como ayudar a personas con distintos tipos de daño neurológico.
Link VO.9 es un chip de 8 milímetros con miles de electrodos que van conectados a hilos flexibles más delgados que un cabello humano que son capaces de monitorear las neuronas.
En la presentación del avance del proyecto, Elon Musk dice que el chip o “fitbit” es colocado por un robot cirujano que introduce los hilos en las áreas del cerebro vinculadas con las funciones sensoriales y motoras. La operación dura menos de una hora, con anestesia local y es totalmente automatizada. Sin dejar ninguna marca grande pues solo deja una pequeña cicatriz apenas visible.
La batería del chip dura todo el día y se puede cargar de forma inductiva. Se puede quitar sin daños cerebrales, cosa que ya se ha experimentado en cerdos que no tuvieron ningún daño al implementar o quitar el chip. También se han realizado pruebas en ratones y monos.
Esta idea persigue la premisa de poder conectar el cerebro a una computadora que analice la actividad cerebral y poder monitorearla para poder detectar inconvenientes en el cerebro.
Uno de los usos más prácticos, puede ser con gente que sufra de Alzheimer para dar al cerebro estimulación eléctrica a ciertas neuronas y resolver problemas neurológicos; de igual manera para crear una copia digital del cerebro o de controlar dispositivos telepáticamente.
Musk está en diálogo con la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) para realizar pruebas en seres humanos, aunque todavía no hay fechas precisas para esto.
El magnate tecnológico comentó que Neuralink está buscando contratar gente para continuar desplegando el proyecto.
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