El mundo de las artes escénicas está de luto por la muerte de la primera actriz Ana Ofelia Murguía, quien falleció este domingo a la edad de 90 años.
Murguía fue una de las actrices más importantes de México, con una trayectoria de más de 60 años en teatro, cine y televisión. Su trabajo la llevó a ganar cuatro premios Ariel, la Medalla Bellas Artes y muchos otros reconocimientos.
Nació en la Ciudad de México en 1933 y se graduó de la Escuela Nacional de Arte Teatral. Su debut profesional fue en 1956 en la obra “El círculo de la escarcha”, de Seki Sano.
A lo largo de su carrera, Murguía trabajó con los directores más importantes de México, entre ellos Felipe Cazals, Jaime Humberto Hermosillo y Arturo Ripstein. Participó en películas clásicas como “El apando”, “Las poquianchis”, “Naufragio”, “Amor libre” y “La reina de la noche”.
En teatro, Murguía destacó en obras como “El señor Puntilla y su criado Matti”, “El zoo de cristal”, “La vida es sueño” y “Las criadas”.
Ana Ofelia Murguía era una actriz versátil, capaz de interpretar una amplia gama de personajes. Era conocida por su talento, su compromiso con el arte y su activismo social.
Su muerte es una pérdida irreparable para las artes escénicas mexicanas. Su legado perdurará por generaciones.
Un legado artístico y humanista
Ana Ofelia Murguía fue una actriz de talla internacional, pero también una mujer comprometida con las causas sociales.
Siempre estuvo al lado de las mejores causas, como la defensa de los derechos humanos, la igualdad de género y la lucha contra la pobreza.
Murguía fue una voz importante en la sociedad mexicana. Su trabajo artístico y su activismo social la convirtieron en una figura admirada por millones de personas.